CLARISAS FRANCISCANAS VIGILIA DE ORACIÓN DOMUND 2012
Vigilia Misionera
Por la tarde nos
hemos dado cita alrededor de 100 personas de diversas parroquias de la Vicaría
VI: Nuestra Señora
de África, la Purificación de Ntra. Señora, la
Epifanía del Señor,
San Vicente de Paúl, San Miguel Arcángel, las Carmelitas de la Caridad de Vedruna,
las Hijas de la Iglesia
entre otros. Nos unimos una vez más a la oración de vísperas preparada
previamente por el Consejo Diocesano de Misiones y dirigida por Sor Lourdes y su
comunidad de Clarisas Franciscanas. La salmodia cantada nos ha permitido
entrar en sintonía de oración en el oasis que representa la vida contemplativa
en una ciudad como Madrid y que en medio del bullicio de los coches hace
presente al absoluto que es Dios para nosotros. Todo por
las misiones, los misioneros y las misioneras que anuncian a Cristo más allá de nuestras fronteras.
Un vídeo de actualidad
Después de las
vísperas se vio el vídeo del Domund,
este año tiene como título Misioneros de la Fe, y nos permite
redescubrir el rostro del misionero; el cual, ciertamente echa una mano en
dónde hay necesidad, pero no deja de decir que lo hace precisamente impulsado
por su amor a Cristo y deseo de imitarle y que por ello deja su propia tierra
para ir más allá a compartir su fe con otros pueblos y culturas.
Una adoración intensa al Señor
El silencio que
nos dejó el vídeo nos ha permitido entrar
en amistad con quien sabemos nos ama y
sostiene a misioneros y misioneras.
Ha sido un momento muy bonito acompañado por cantos animados por algunos
jóvenes de la parroquia de San Miguel
Arcángel de Carbanchel. Especial densidad en la adoración aportó el
fragmento de Historia de un alma en el que santa Teresa del Niño Jesús descubre su vocación en la Iglesia: “Entendí que la Iglesia tiene un corazón y
que este corazón está ardiendo de amor. Entendí que sólo el amor es el que
impulsa a obrar a los miembros de la
Iglesia… Entonces, llena de alegría desbordante, exclamé: ¡Oh
Jesús, amor mío, por fin he encontrado mi vocación: mi vocación es el amor… En
el corazón de la Iglesia,
que es mi madre, yo seré el amor”. (Manuscrito B 3v)
Gratitud recíproca
Al final pudimos
agradecernos mutuamente la presencia y oración por los misioneros. Con gran
fineza las Clarisas Franciscanas nos han abierto su fraterna solicitud a
todos y pudimos despedirnos con inmenso gozo mezclado con un aumento de amor y
admiración por las misiones. Los misioneros y las misioneras han
estado muy presentes en nuestros pensamientos y lo estarán durante todo este
mes misionero y Año de la fe que iniciará dentro de poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario