25 jun 2013

MADRID. ENVÍO MISIONERO

Muchos jóvenes madrileños ayudarán a la Misión en diversos lugares del mundo

La Delegación Episcopal de Misiones de Madrid se esfuerza por que la misión Ad Gentes se haga presente en la archidiócesis de Madrid. El domingo pasado con la presencia del obispo auxiliar Don César Franco Martínez, se ha vivido con gran emoción el envío de muchos jóvenes madrileños a diversos lugares del mundo. José María Calderón, delegado episcopal de misiones y párroco de la parroquia misionera, del Sagrado Corazón de Jesús, ha invitado a todos los grupos, asociaciones y Congregaciones Misioneras para
vivir “el encuentro con la misión” o las llamadas “experiencias misioneras de verano” como envío eclesial.
 ¡Qué alegría! ver a tantos jóvenes, chicos y chicas, que con entusiasmo y  fe dedican su tiempo de vacaciones para vivir de cerca y con los misioneros y misioneras el encuentro con la Iglesia misionera y universal. Presentes se encontraban: Jóvenes para la misión, Selvas Amazónicas, las Misioneras Cruzadas de la Iglesia, el Seminario Conciliar de Madrid, la Acción Católica, los Misioneros Javerianos y las Misioneras Franciscanas de María, el Regnum Christi, Fundebe, varias parroquias de Madrid y desde luego de la Vicaría VI San Miguel Arcángel de Carabanchel. Los destinos a varios países en distintos Continentes. Rumania, Etiopia, Sierra Leona, Ecuador, México, Chad, Marruecos, etc., e incluso al campo de inmigrantes de Ceuta.
Una razón: el deseo del encuentro con el hermano y hermana tal y como Jesús lo hizo. Compartir la fe, la vida, los deseos de futuro, el tiempo, nuestra humanidad. Todo esto hacía de este encuentro una celebración de vida. Juventud y más juventud, misión y ensanchamiento del Corazón. Para todos el deseo es el de vivir este encuentro y don de la vida al ejemplo de Jesús y en su seguimiento. Así decía la lectura evangélica que se proclamaba ahí: “Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará” (Lc 9,18).
El mismo domingo 23 de junio en el rezo del Angelus el Papa Francisco decía a los jóvenes: “¡No tengáis miedo de ir a contracorriente! ¡Estad orgullosos de ello!”, exclamó el papa, quien agregó: “os quieren robar la esperanza. Los valores estropeados que os ofrecen, son como la comida estropeada: hacen daño.” Antes había dicho: “Cuántos jóvenes renuncian a los propios intereses para dedicarse a los niños, a los discapacitados, a los ancianos… ¡También ellos son mártires! Mártires cotidianos, mártires de la cotidianeidad.” Sí, eso es lo que vivirán muchos de estos jóvenes enviados a la experiencia de la misión, renunciar a sí mismos para dedicarse a los demás, esa es la misión a la que todos estamos llamados, al ir a otros países, recordamos que la humanidad entera es el campo de Dios y no podemos encerrarnos en nuestro campo olvidando el de Dios que abarca la humanidad entera…
Rolando Ruiz Durán sx

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